Hasta la Delegación Presidencial de la Región del Biobío llegaron los alcaldes de Lebu, Contulmo, Tirúa, Arauco, Quilaco, Tucapel, y San Rosendo, junto a representantes de Cañete, Cabrero, Negrete, Mulchén y Alto Biobío, para participar en una ceremonia de entrega de financiamiento para 34 proyectos priorizados por sus municipios y las comunidades. Este aporte, de más de 4.500 millones de pesos, proviene de la Subsecretaría de Desarrollo Regional (Subdere), en el marco del Plan Buen Vivir, con el objetivo de mejorar las condiciones de vida en las comunidades más rezagadas de la región.
Este financiamiento es el resultado del trabajo conjunto entre el Plan Buen Vivir y la Subdere, que desde 2023 han colaborado estrechamente con los equipos comunales de las provincias de Arauco y Biobío. El esfuerzo ha permitido levantar una cartera de proyectos que reflejan las principales necesidades identificadas por los municipios y las comunidades locales. Estas iniciativas están diseñadas para ser ejecutadas durante los años 2023 y 2024, con el propósito de atender demandas históricas y mejorar la infraestructura y servicios en las zonas rurales.
La Delegada Presidencial Regional, Daniela Dresdner valoró esta entrega de recursos y el mecanismo de financiamiento de la Subsecretaría de Desarrollo Regional. “Estamos hablando de alrededor de 4.500 millones de pesos que están siendo entregados en estos proyectos y que forma parte de una política de gobierno, de llegar a las comunas que más han necesitado durante mucho tiempo esta intervención del Estado. Eso es algo que nosotros estamos haciendo en conjunto con el Plan Buen Vivir, priorizando las comunas más rezagadas con recursos frescos. Esta vez hemos utilizado la herramienta de la Subdere, que es una muy buena herramienta para llegar rápidamente con los recursos a las comunas y poder cubrir las necesidades que los alcaldes y alcaldesas nos han levantado y que a ellos se los han levantado sus comunidades”, comentó la autoridad.
Por su parte, el alcalde de Lebu y presidente de la asociación de municipios Arauco 7, Cristián Peña, destacó el impacto de esta inversión. “Vemos una provincia totalmente distinta a la que encontramos hace tres o cuatro años. Las inversiones se han reactivado y este es un adelanto significativo gracias al Plan Buen Vivir. Estos recursos están inteligentemente dirigidos a resolver problemas concretos de la gente, con proyectos que benefician directamente a nuestras comunidades y vecinos.”
El coordinador nacional del Plan Buen Vivir, Francisco Arellano, subrayó que este financiamiento es parte de la estrategia del gobierno para abordar las dificultades de las provincias que se encuentran bajo estado de excepción: “El Plan Buen Vivir es una respuesta integral para aumentar la inversión en zonas rurales y territorios donde habitan comunidades mapuche, lugares a los que tradicionalmente no llegaban los recursos. El trabajo con la Subdere y los alcaldes ha sido clave para fortalecer las capacidades de los municipios más aislados, permitiéndoles postular a proyectos que ahora cuentan con el financiamiento necesario.”
Por su parte, el jefe regional de la Subdere, Patricio Rojas, valoró la alianza estratégica entre el Plan Buen Vivir y la Subsecretaría: “Hemos logrado una inyección de recursos significativa para financiar una cartera de proyectos priorizados. En estos dos años y medio de gobierno, hemos financiado alrededor de 60 mil millones de pesos, superando ampliamente lo logrado en la administración anterior. Esto ha sido posible porque los municipios han sido capaces de levantar proyectos que responden a las necesidades urgentes de sus comunidades.”
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