“Un apoyo muy importante a las labores de combate de incendio a Conaf, a las empresas forestales y a toda la institucionalidad del Estado, por lo que es una muy buena noticia. Ya habla de un trabajo, no de estos días, sino que de hace muchas semanas y meses, preparando precisamente la temporada que vamos a enfrentar, con 670 kilómetros de cortafuegos en toda la región del Biobío”. Con esta declaración, el Delegado Presidencial del Biobío, Eduardo Pacheco, valoró positivamente la llegada del Hércules C-130 al aeródromo María Dolores de Los Ángeles.
Este es un avión tanquero pesado de gran capacidad y muy alta velocidad que permite responder a incendios a escala nacional de forma rápida y efectiva. El ministro Esteban Valenzuela explicó que se mantendrá apostado en la región del Biobío y es el segundo avión de este tipo con el que se combatirán los incendios forestales durante la presente temporada.
“Este avión se complementa enormemente con el Boeing 737 presentado a fines de noviembre por el presidente Gabriel Boric en la región de Valparaíso, dado que aunque no es tan veloz como éste, puede acceder y operar en zonas donde el Boeing no podría, llevando la misma carga y por tanto cumpliendo con la misma misión”, sostuvo el ministro Valenzuela. Además, el secretario de Estado señaló que este avión tiene “una capacidad de lanzamiento de 15.000 litros de agua o retardante y puede reducir mucho su velocidad, lo que permite operar en terrenos complejos”.
Asimismo, la directora ejecutiva de Conaf, Aída Baldini, explicó que este avión “el Hércules C-130, está programado para trabajar en todo el país, pero obviamente en esta zona donde puede ser más requerido. Por velocidad puede llegar muy rápido, por ejemplo, a Magallanes. Hemos seleccionado estos dos aviones tanqueros, el Boeing y el C-130, para poder llegar rápidamente a cualquier región ante una emergencia”.
Además, la directora resaltó que “en esta temporada hemos intensificado todo el trabajo para seguir conociendo el comportamiento del fuego. Por lo tanto, en la medida que nosotros más lo conozcamos, vamos a poder ser más eficientes. En estos momentos estamos ya con programas hechos por profesionales, especialistas de CONAF, que nos permiten ir dando las señales inmediatas a SENAPRED ante cualquier posibilidad de evacuación que se requiera, también para acentuar las medidas preventivas ante la probabilidad de ocurrencia, como también para el modelamiento del comportamiento del incendio para las labores de combate”.
Este avión tanquero tiene una autonomía operática de tres horas y tiene una capacidad de lanzamiento de 15.000 litros de agua o retardante. Posee alta maniobrabilidad y puede reducir mucho su velocidad, lo que permite operar en terreno complejo, trabajar a menor altura y realizar descargas parciales o totales con muy alta precisión. Esto también le permite adaptarse al resto del grupo aéreo con mayor facilidad, realizando un trabajo coordinado y expedito.
Su tripulación es la misma que ha operado en otras ocasiones en Chile, por lo que tiene gran conocimiento de nuestro territorio, geografía, incendios y capacidades; y está altamente integrada a nuestro dispositivo de control de los incendios.